Asisto al centro de yoga Achala desde hace dos años y, en primer lugar, quiero hablar de las cosas que NO os vais a encontrar. A saber;
En clase: vinyasa krama es poco conocido y no lo habréis practicado antes en ningún centro de Huelva y, por supuesto, tampoco con Chuan lan en sus videos de YouTube. Tendréis que desaprender lo aprendido.
El alumnado: tampoco vais encontrar chicas y chicos enseñando cuerpazos con modelitos imposibles buscando la postura ideal para la foto de Instagram ,ni risas entre ellos o charlas enmedio de una práctica.
El profesor: Adriano no es un profesor de yoga común y corriente; no te enseña posturas ,ni siquiera pranayamas… no te pondrá música ni durante la práctica ni en la relajación, no hay distracciones con él ,no hay risas ni cachondeo, tampoco pierde el tiempo en la hora y media que dura la clase.
Ahora resumiré lo que SÍ podréis encontrar en Achala, lo que yo he encontrado:
La práctica es seria y respetuosa con el alumnado y entre el alumnado , he aprendido una disciplina que me ha llenado en todos los sentidos (físico, mental y espiritual) , he mejorado casi sin darme cuenta con el paso del tiempo y estoy enganchada al vinyasa krama porque mi cuerpo y mi mente me demandan más y más. Estoy aprendiendo un estilo de vida y enseñanzas ancestrales basadas en los yoguis más puros.
Adriano nos guía y nos muestra el camino.
Mi valoración de estos 2 años en Achala queda clara, lo recomiendo 100% (siempre y cuando tengáis la mente abierta)
